domingo, 3 de octubre de 2010
...conciencia mágica
viernes, 23 de julio de 2010
Recuerdos de arena y sal...
Anochece en la playa y tú no estás aquí…
Llueve afuera y tú no estás aquí…
He de decirte amor mío, que me siento como el mismo y todavía no soy… aún a esta altura de mi vida no tengo idea de quien soy… no se donde estoy, a donde voy…
Ahora, con el paladar harto del sabor de la libertad, no tengo otra cosas que agradecer profundamente a esa cohesión predicadora del orden… a esa fuerza que mantiene mi cráneo unido y mi encéfalo inflamado…
Y aún recientes los recuerdos, flotando en su irrealidad azul, van y vienen dentro de mi demencia…
Es dulce el sabor de la libertad, el aire que golpea mi cara, que penetra mágico a mis pulmones… soy uno con el todo y el todo ahora forma parte de mí…
Bendita sea la lluvia que me moja en el mar, que me hace sentir apenas consiente, vivo e infinitamente pequeño comparado con lo que me rodea…
Bendita sea la noche, enredándome y absorbiéndome en sus tramas, llevándose mis más profundas nostalgias y tristezas al ritmo de las olas que mojan mis pies, mismas olas que arrastran mis redes y las llevan donde ellas quieren y donde no puedo verlas, para que cuando finalmente llegue el momento de sacarlas, me encuentre con los frutos del agua, con nuevas sorpresas, aprendizaje y vida…
Bendita el hambre, bendito el frio, bendita la sed…
Bendito sea extrañar mi otro mundo y aún más bendito este, por que me recuerda aquel, a las tantas y tantas caras familiares que tonta y generalmente no valoro, bendito el destino, que me ha regalado brazos y espalda fuertes, que ahora son útiles… para trabajar… para resistir…
Bendito el tiempo que estuve lejos para entender tanto y tanto, para extrañarte cada día más… para terminar de amarte… quizá, ahora soy más sabio… quizá sea más viejo… pero aún siento, que jamás, que nunca sabré nada… =)
domingo, 20 de junio de 2010
A veces...
A veces siento que te quiero más que el día anterior…
A veces, cuando te tengo cerca no siento dolor… brilla el cerdo por su ausencia… y supongo que me gusta…
A veces, tenerte a mi lado, sentir tu respiración, cálida, llena de tu aroma, ese aroma que me vuelve loco, me eleva, me llena… me mata…
A veces, escuchar tu voz, saludarte en la mañana cuando aún el hermoso sonido que sale de ti no tiene su usual modulación, me hace brincar el corazón, deja de funcionar mi cuerpo… se sacude, se retuerce y contuerce todo mi sistema… se pierde el equilibrio entro en la catarsis de la entropía del amor…
A veces estando contigo sueño despierto… sueño que somos viejos y que gozamos del milagro de amarnos tanto en la mesa como en la cama… y llegamos a esa felicidad, la despreocupación de todo, nuestra soledad compartida… tan felices que todavía agotados retozamos como conejitos y nos mordemos como perros… y cansado maldigo al tiempo que pasa lento cuando no estoy contigo y que se me escurrió de los dedos cuando te tuve a ti…
A veces eres la solución a mi atormentada alma… a mi mente vagabunda e incoherente… a veces soy un perro triste… perro que te deja en tu puerta y vive el momento más difícil del día… que como un adicto no puede dejar de pensar en la próxima vez que va a tenerte… para él… para los dos… entera, hembra… mía…
Y pienso en nuestras historias todavía no escritas… pero ya predestinadas por un “algo”… y me rió de mis errores tontos… y siento un hoyo en el estómago en medio de ese sueño, que no es sueño de cansancio y hartazgo… no es el sueño que sentí toda mi vida… es un sueño que es más parecido a la paz…
A veces se que me haces falta… todo el tiempo…
A veces, solo quiero que esos “a veces” duren por siempre.
miércoles, 26 de mayo de 2010
un dia viví cansado...
martes, 27 de abril de 2010
flowers in her hair ...
Salí de tu casa entonces… iba con la chamarra puesta, la camisa mal arreglada y los audífonos puestos, la música por supuesto inútil… no tenia idea de a donde iba o que escuchaba… mi cerebro trataba inútilmente todavía de procesar lo que había pasado… seguía pensando en ti…
Recordé de pronto la primera vez que te vi, flacucha, larga y sin chiste… “seguro está bien pendejita, basta con verle la cara…” mis recuerdos brincaban de un lado a otro como piedritas en el pavimento, pasaban de ese primer momento, a cuando estabas acostada, incluso recuerdos que nunca pasaron, fantasías sin sentido, yendo y viniendo, mezclados y entrecortados, como disco rayado…
Mi cerebro de pronto se detiene en este último recuerdo… -¡fíjate pendejo!... –¡perdón / verga, acabo de pisar un charco y salpiqué a una señora, pero, ¿en que estaba? Oh si, este último recuerdo… apareces tú, como flotando… líquido azul… espera, ¿líquido azul?... mierda, eso no pasó… concéntrate… ¿que acabas de vivir?... estaba ella, ¿como empezó?... empezamos a besarnos como náufragos con sed… solo nuestra saliva la mitigaba… nos besábamos con una ansiedad desesperada mientras poco a poco caía la ropa… ¿si fue así?, no, estábamos tirados en tu cama… si, así fue… la ropa no cayó a ningún lado…
Te deshiciste de tus corpiños superpuestos, de tu sweater, si, era el rojo… el bonito… te quité toda la ropa y quedaste prácticamente convertida en nada… eras una ranita escuálida, pequeñita… de senos insipientes y piernas tan delgadas que el diámetro de mis muñecas fácilmente podría opacarlas… sin embargo tenias ese olor delicioso a almizcle, un olor azufrado que repentinamente invadió toda la habitación… y me volvió loco…
Por primera vez en lo que me ha parecido una eternidad mi cerebro capta algo de lo que escucho… “A creature made of sunshine.
Her eyes were like the sky” no podría ser más adecuado… tenias una decisión y un calor que definitivamente compensaban tu fragilidad… tenerte entre mis dedos, recorrer tus carnes con mis manos fue algo enteramente irreal… no pude responder muy rápido… ¿tu cara? ¿Como se veía tu cara? “She smiles like a child with flowers in her hair, With blood on her hands, Into the sun she stares… She feels it die…I heard her cry”… si definitivamente parecías una niña… una niña muy bonita… con flores en el cabello… *tururú* próxima parada, Viaducto ¿Dónde mierda estoy? ¿Qué hago aquí?...
Al primer contacto tus huesos parecían desarticularse con un crujido sordo e imperceptible a quien no estuviere en contacto… tu piel pálida se deshacía en sudores y olores… tus ojos estaban llenos de lagrimas… esos ojos de leoparda insomne me desarmaban en la oscuridad… mi corazón se desbarató en un manantial de obscenidades tiernas… creo que estaba enamorado…
Encendí un cigarrillo y seguí caminando… “ahora triste en la pendiente, solitario y ya vencido yo me quiero confezaaaaaaar… si aquella boca mentía, por aquellos ojos brujos, yo habría dado siempre más…”
De pronto reconozco la letra y mi mente la repite como un imbécil… un imbécil enamorado… “eraaaaa, para mi la vida entera, como un sol de primaveraaaa, mi esperanza y mi pasión… ahoooraaa, cuesta abajo en mi rodada, las ilusiones pasadas… yo no la puedo arrancaaar…”
No volví a tener conciencia de mi mismo hasta que toqué la puerta de mi casa… -¿Como te fue amor? –Bien. -¿Qué tienes? –Nada.
jueves, 11 de marzo de 2010
perder a una amiga...
viernes, 19 de febrero de 2010
es triste ser un fantasma…
Tomé en mis manos tus senos tibios y medianos… no eras precisamente de mi gusto, pero la testosterona es cabrona y más cabrón es el que la aguanta…
Tú, con tus manos blancas, tejías enredados caminos que llegaban a la nada… de pronto cesa el fuego, y sueltas una enorme y larga letanía de la gente de mi edad, de lo peligroso que resultan los fugaces encuentros con mujeres mayores como tú… y me hablas de tu novio, de tus amigos, de tu percepción del mundo que a final de cuentas resulta ser tan general que parece ser sacada de “el libro de las generalidades”
La sugestión es poderosa, y tú haz logrado que considere peligroso lo que hago y eso eleva poderosamente mi ritmo cardiaco, a pesar de la evidente intoxicación de alcohol, fármacos y demás sustancias, soy perfectamente consiente de lo que hago… y te silencio con un beso…
Lentamente caemos en una espiral de sensaciones extrañas… te hacen estallar mis dedos y mi lengua aventurera te hunde en placeres indescriptibles, por que no alcanzan todas las palabras para describir, tu aliento agrio a cerveza, desplazándose hacia mis oídos, tu respiración entrecortada, intercalada con palabras necias “que rico…es tarde vamos a dormir…”
Respetuosamente pido permiso para comerte el coño, siento que es la única acción caballerosa que podría hacer… darle fin al absurdo encuentro… con la cabeza entre tus piernas, usando mis habilidades de macho precoz, que me han enseñado otras mujeres mayores como tú…
Soy víctima y victimario… soy perro experto entrenado por entes egoístas para su placer… soy la “opción” para encuentros fugaces, para follarte en el aire, hacerte enteramente hembra, darte lo que de vida tengan tus urgencias… soy manipulable, desechable como pocas cosas lo son… caminamos despacio al rincón… tú en mis brazos… no había prisa… vivíamos en la incomprensible madrugada helada…
Después de un rato consigo mi objetivo… al otro día no recuerdas nada… tal vez en algún momento obtenga una revancha, no se, no me importa… y nos encontraremos quizá tal vez un día, de soledad y rabia… y fingiremos que no pasó nada… y sobre todo fingirás que no te gustó… y preguntarás ese día ¿Por qué la cara larga?...
Y voy a responderte “es triste ser un fantasma…”